¿TOMAS REFRESCO? ¿TOMARÍAS 12 CUCHARADAS DE AZÚCAR?

¿TOMAS REFRESCO? ¿TOMARÍAS 12 CUCHARADAS DE AZÚCAR?

By Family Card Health on diciembre 3, 2019 in Nutrición

El problema de consumir refresco es que, además de no brindar nutrientes, las calorías que aportan no dan saciedad, de ahí que se les llame “calorías vacías” y se suman a la de los alimentos del día. Estas calorías se acumulan a través del tiempo y derivan en sobrepeso y obesidad.

El consumo de refresco en México es de los más elevados, con un incremento rápido en el consumo sin precedente en la historia mundial. Las consecuencias de ese nivel de ingesta se reflejan en los servicios de salud que atienden cada vez más pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles de alto costo. Las prevalencias de sobrepeso, obesidad y diabetes han aumentado con rapidez; diariamente, una alta proporción de la población mexicana toma bebidas de alto contenido calórico, sin saber las consecuencias que pueden ocasionar en la salud; este alto consumo se asocia a la sensación agradable provocada por los ingredientes utilizados en su elaboración, que parecen provocar adicción en los consumidores.

Diversos estudios realizados han demostrado la relación entre el consumo de bebidas azucaradas y el sobrepeso y obesidad. México y la Unión Americana, son países que presentan los más altos índices de obesidad en niños y adultos, asociado también a un elevado consumo de bebidas carbonatadas. Un estudio de la Universidad de Yale en Estados Unidos, reporta que un mexicano promedio bebe 163 litros al año, lo que representa medio litro al día. Entre los datos más relevantes de la investigación, se encontró que el consumo de refresco es la principal fuente de calorías de la dieta, ya que en promedio se ingiere 50 gramos de azúcar equivalentes a 200 kilocalorías extras.

Se demostró que un litro de refresco tiene el equivalente a 27 cubitos de azúcar; por lo cual si en promedio se ingiere medio litro de esta bebida diariamente, se consume alrededor de 14 cubos de azúcar por día.

En Canadá se realizó un estudio con el objetivo de evaluar la relación entre la ingesta de bebidas azucaradas y las concentraciones de triglicéridos y colesterol HDL, y se encontró que existe asociación en el incremento de las lipoproteínas con el consumo frecuente de refrescos.

Una dieta saludable no requiere líquidos calóricos para satisfacer las necesidades de energía y nutrientes. En consecuencia, el agua potable puede utilizarse para satisfacer casi todas las necesidades de líquidos de los individuos sanos. Sin embargo, para permitir cierta variedad y preferencias individuales, una dieta saludable puede incluir diversos tipos de bebidas además del agua. El desarrollo de estas recomendaciones de bebidas es la posibilidad de ayudar a los consumidores a elegir y al gobierno a promover una variedad de bebidas sanas, con objeto de sustituir el patrón actual poco saludable de las bebidas ingeridas.

Referencias:

Rodríguez-Burelo, María del Rosario, & Avalos-García, María Isabel, & López-Ramón, Concepción (2014). Consumo de bebidas de alto contenido calórico en México: un reto para la salud pública. Salud en Tabasco, 20(1). [Fecha de Consulta 2 de Diciembre de 2019]. ISSN: 1405-2091. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=487/48731722006

Rivera, J., Muñoz Hernández, O., Rosas Peralta, M., Aguilar Salinas, C., Popkin, B. and Willett, W. (2008). Consumo de bebidas para una vida saludable: recomendaciones para la población mexicana. Boletín médico del hospital infantil de México, 65(3).