Recuperar lo positivo / abandonar lo negativo.

Cuando estamos inmersos en una crisis, fácilmente olvidamos hacer aquellas actividades  placenteras que naturalmente reducen nuestro estrés.

Por nombrar algunos ejemplos incluiríamos: comer comida para llevar, jugar al tenis, tumbarse en una silla de jardín al sol en el patio trasero, mirar nuestro programa de televisión favorito; jugar con nuestros perros y gatos, escuchar música, ver fútbol o baloncesto, y disfrutar de la compañía de familiares y buenos amigos.
Puede que le resulte útil identificar actividades relajantes que solía hacer antes del desastre y luego obligarse a comenzar a hacerlas una vez más. Al volver a participar en estas actividades agradables, interrumpirá el flujo de imágenes y pensamientos negativos causados por la catástrofe que vivió y se recordará que el desastre son solo una parte muy pequeña de la vida.
Además de restaurar los aspectos positivos de su vida, le puede resultar útil reducir los aspectos negativos. Si se siente estresado por las imágenes de destrucción provocadas por el desastre, no las mire. Apague la parte de las noticias que muestran los efectos destructivos de los desastres. No mire fotos desagradables en Internet. Cultive el momento, escuche algo de música en lugar de las noticias. No consuma más imágenes negativas e información de las que puede tolerar. Si hay personas desagradables en su vida que puede evitar en este momento, evítelas. Identifique personas negativas y cosas que lo deprimen, y reduzca de momento su contacto con ellas.